Tras deleitarnos hace tan solo un par de meses con el sobresaliente Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge, las míticas Tortugas Ninja regresan una vez más para traernos lo que para muchos de nosotros es un sueño hecho realidad: un cuidadísimo y completo recopilatorio con todos sus juegos de 8 y 16 bits lanzados entre finales de los años 80 y principios de los 90 que nos ha devuelto de golpe y porrazo a una época que recordamos con muchísimo cariño.
Una colección muy completa
Siendo un poco más concretos, los títulos que se han incluido en esta nueva colección retro son los siguientes:
- Teenage Mutant Ninja Turtles (Arcade)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: Turtles in Time (Arcade)
- Teenage Mutant Ninja Turtles (NES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles II: The Arcade Game (NES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles III: The Manhattan Project (NES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: Tournament Fighters (NES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles IV: Turtles in Time (SNES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: Tournament Fighters (SNES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: The Hyperstone Heist (MD)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: Tournament Fighters (MD)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: Fall of The Foot Clan (GB)
- Teenage Mutant Ninja Turtles II: Back From The Sewers (GB)
- Teenage Mutant Ninja Turtles III: Radical Rescue (GB)
Como veis, el listado es completísimo y no hay ninguna ausencia que lamentar más allá de la falta de varias conversiones que se hicieron para ordenadores y las versiones PAL (solo podremos seleccionar las ROM japonesas y americanas), ofreciéndonos todos los juegos que definieron aquellos años en los que la fiebre por Leonardo, Raphael, Michelangelo y Donatello reinaba entre la chavalería del mundo entero gracias, sobre todo, al exitazo de su serie de animación de 1987.
Algo que nos parece muy importante y relevante es el hecho de que la inmensa mayoría de estos títulos nunca habían sido recuperados o relanzados, lo que le da un valor incalculable al recopilatorio y supone toda una victoria en la lucha por la preservación del videojuego, una especialmente significativa si tenemos en cuenta la cantidad de problemas legales que suelen asociarse con este tipo de productos licenciados.
Centrándonos ya en lo que son los juegos como tal, hay que tener muy en cuenta que son hijos de su tiempo y que algunos no han envejecido especialmente bien o ni siquiera fueron demasiado destacables en su día, aunque eso no quita que la mayoría de estas obras sigan siendo capaces de ofrecer buenas dosis de diversión rápida y directa.
No en vano, Turtles in Time sigue siendo todo un clasicazo y un beat em up brutalmente divertido en sus dos versiones, The Arcade Game (NES) y The Manhattan Project son otros buenos exponentes del género a pesar de las limitaciones gráficas de la consola en la que se lanzaron, Radical Rescue resulta un metroidvania de lo más apañado y Tournament Fighters es un juego de lucha al más puro estilo Street Fighter II bastante decente en su versión para SNES. Además, tampoco nos olvidamos de The Hyperstone Heist, otro “yo contra el barrio” muy entretenido, de Back From The Sewers, una aventura lineal de acción y plataformas más que competente, ni mucho menos del mítico arcade original de 1989 en el que tantas monedas de cinco duros nos dejamos. No es que sean precisamente obras maestras, pero cualquier amante de la licencia sabrá disfrutar de estas propuestas sin apenas dificultades, algo a lo que también ayuda la enorme nostalgia que evocan.
En el otro lado de la balanza tendríamos juegos como el infernal y frustrante Teenage Mutant Ninja Turtles de NES, el insulso Fall of the Foot Clan o la desastrosa versión para Mega Drive de Tournament Fighters, un juego a evitar que nos parece incluso peor que su contrapartida para NES, la cual fue muy loable considerando las limitadas capacidades técnicas de la consola.
Todo un ejemplo de cómo hacer un gran recopilatorio de juegos retro
Que se hayan incluido tantísimos juegos ya es un buen indicativo de que estamos ante un producto muy cuidado que sus desarrolladores se han tomado en serio, algo que se termina de confirmar en el mismo momento en el que empezamos a jugar y a indagar en todas las opciones que se han incluido.
Para empezar, os alegrará saber que la emulación es simple y llanamente perfecta, lo que se traduce en una experiencia de juego extremadamente fiel a la que podía obtenerse en sus plataformas originales, sin retrasos de ningún tipo en los controles ni bugs añadidos. Evidentemente, esto también significa que se ha apostado por mantener los mismos defectos técnicos, como el característico parpadeo de sprites de NES o las ralentizaciones de las que adolecían algunos juegos en los momentos con mayor carga gráfica, algo que tiene ciertos matices que detallaremos más adelante.
Como podréis intuir, no faltan numerosas opciones y ayudas adicionales que, si queremos, nos harán la vida más fácil, pudiendo guardar partida en cualquier momento o rebobinar unos segundos para corregir errores. Es más, incluso podemos ver la grabación de una partida perfecta en la que el jugador no recibe ni un solo golpe y tomar nosotros el control en cualquier momento, algo que sirve tanto para aprender a jugar y a superar ciertas secciones como para ir directamente a los niveles que queramos para practicarlos o simplemente disfrutarlos.
Por supuesto, también contamos con la posibilidad de aplicar distintos filtros para darle a la imagen un aspecto similar al de un televisor o monitor CRT, así como uno adicional que replica de forma convincente la pantalla LCD de Game Boy. No vamos a negar que los tres que hay nos han parecido un poco escasos y nos han hecho echar de menos algunas opciones más, aunque también hay que decir que son de mucha calidad y mejoran la experiencia visual considerablemente. Lamentablemente, no podemos guardar la configuración de vídeo que queremos de forma independiente para cada juego, así que nos tocará cambiar los filtros manualmente cada vez si así lo deseamos, algo que, por suerte, no nos llevará ni 2 segundos.
Si decimos esto último es porque la interfaz, la disposición de los menús y las cargas son impecables. No solo está todo presentado de forma elegante, estilizada y llamativa, sino que alternar entre juegos, cambiar opciones al vuelo o usar las diferentes ayudas que nos ofrecen es algo muy inmediato, ágil, cómodo e intuitivo. O lo que es lo mismo: siempre tendremos a mano cualquier cosa que necesitemos para ahorrarnos tediosos pasos de más y aburridas esperas, demostrando un buen diseño y una buena optimización.
Tampoco podemos olvidarnos de comentar que cada título viene con un menú de opciones personalizado que, dependiendo del juego, nos permitirá activar diferentes modificadores, como hacernos invulnerables, desbloquear el selector de niveles, aumentar notablemente la dificultad o incluso eliminar el mencionado parpadeo de sprites y las ralentizaciones que adolecían los juegos de NES, pequeños detalles que se agradecen mucho de cara a configurar la experiencia completamente a nuestro gustoVenir de Tragamonedas Gratis Online.
Un multijugador online que se queda cojo
Lo que nos ha chocado un poco ha sido su multijugador en línea, el cual se ha limitado a tan solo los siguientes cuatro juegos:
- Teenage Mutant Ninja Turtles (Arcade)
- Teenage Mutant Ninja Turtles:Turtles in Time (Arcade)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: Tournament Fighters (SNES)
- Teenage Mutant Ninja Turtles: The Hyperstone Heist (MD)
Sinceramente, no terminamos de entender esta decisión, ya que deja fuera títulos que nos habría encantado disfrutar con nuestros amigos a través de internet. Además, cuando juguemos de esta manera no podremos hacer uso de ninguna de las opciones de configuración que os hemos detallado, impidiendo que, por ejemplo, podamos activar los filtros para la imagen. Lamentablemente, no os podemos decir nada todavía sobre el rendimiento de las partidas online, ya que los servidores no se abrirán hasta su lanzamiento.
Un museo de ensueño
Para el final hemos dejado uno de los mayores aciertos de todo el recopilatorio: su espectacular galería de extras. Una auténtica pasada completamente imprescindible para cualquier fan de las Tortugas Ninja que incluye una cantidad de archivos tan brutalmente extensa que se ha incluido hasta un buscador para que podamos dar rápidamente con cualquier cosa que nos interese.
Documentos de diseños, kits de prensa, anuncios publicitarios para las revistas de la época, montones de ilustraciones y bocetos, manuales de instrucciones, cajas originales, guías de estilo, portadas de todos los cómics publicados, frames de todas las temporadas de todas las series de animación que se han hecho de la licencia (desde la original hasta Rise of the Teenage Mutant Ninja Turtles), un reproductor para escuchar la banda sonora de los juegos y un largo etcétera. Materiales de un valor e interés incalculable que nos han fascinadoVenir de Tragamonedas Gratis Online. No exageramos lo más mínimo si decimos que nos hemos pasado horas disfrutando de todo lo que esconde y que es uno de los mayores museos que se han incluido nunca en videojuego alguno, un tipo de extra que se nos antoja fundamental en cualquier recopilatorio de este estilo.
Conclusiones
Teenage Mutant Ninja Turtles: The Cowabunga Collection es exactamente lo que esperamos de una gran colección de juegos retro. No se deja fuera ninguno de los títulos que marcaron la edad dorada de las Tortugas Ninja, los emula de maravilla, los filtros de imagen son de calidad, añade montones de opciones de configuración y accesibilidad y remata la jugada con una galería de extras increíble. Quizá los títulos como tal no sean precisamente obras maestras, el online se haya quedado un poco cojo y los filtros nos han resultado un tanto escasos, pero eso no quita que estemos ante un producto mimadísimo, con un gran valor histórico y capaz de ofrecer diversión y nostalgia a partes iguales que difícilmente os querréis perder a poco que os apasione la creación de Peter Laird y Kevin Eastman. Y si acompañáis vuestras partidas con una buena pizza, mejor que mejor.
Hemos realizado este análisis gracias a un código de descarga para PS5 que nos ha ofrecido Konami.